Entre las afecciones más comunes del aparato digestivo
que se manifiestan por acidez está el reflujo gástroesofágico (el retorno del
contenido del estómago hacia el esófago) que ocurre en varias circunstancias y
en pacientes de todas las edades.
El reflujo gástroesofágico ocurre cuando la
comida o el líquido del estómago van a parar al lugar equivocado y viajan
hacia arriba a través del esófago en lugar de quedarse en el estómago.
Normalmente, la comida pasa de la boca hacia
abajo por el esófago y hacia el estómago. En el punto en el que se unen esófago
y estómago hay un músculo que se encarga de mantener la comida en el estómago.
Cuando existe reflujo gástroesofágico es porque el músculo puede abrirse en el
momento equivocado, dejando pasar alimentos y ácido gástrico al esófago.
Además, la
acidez estomacal puede ser anormal y los síntomas típicos de reflujo
gástroesofágico son:
Regurgitación después de las comidas copiosas.
Ardor retroesternal (pirosis).
Regurgitación nocturna.
Dificultad para tragar (dlsfagia).
Dolor al tragar (odinofagia) y excesiva
salivación.
Náuseas.
Eructos.
Tos y otras
molestias respiratorias.
Casi todos hemos sufrido alguna vez una
indigestión.
Algunas de las causas de que se produzca una
cantidad excesiva de ácido en el estómago y de lugar a las molestias antes
descritas son: